Reseña de «Trancemónium» de Aitor Bertomeu
La verdad es que si os soy sincero no sé ni como empezar esta reseña, pues me vienen a la cabeza muchas frases hechas. Por ejemplo: «La vida te da sorpresas» «Nunca sabes con lo que te vas a encontrar» o «Bendito el día en que te cruzaste en mi camino». Todas ilógicas para hablar de un libro, pero en el caso de «Trancemónium» vienen que al pelo por su locura insaciable.
En un principio solo puedo dar las gracias a mi compañera Támara López por regalarme esta joya y sugerirme su lectura. En segundo lugar, y con motivo del reciente merecidísimo Premio Cervantes a Eduardo Mendoza, debo decir que desde la época de mi juventud en la que me reí a carcajada limpia con «Sin noticias de Gurb» o «El misterio de la cripta embrujada» del galardonado, no había vuelto a experimentar la misma sensación leyendo. Con este libro compuesto de cinco relatos a cual más brutalmente divertido, Aitor ha hecho que sea un fan incondicional de su arte. Porque el arte engloba muchas cosas, pero para mi no creo que haya nada más difícil que hacer reír (por no decir descojonarte vivo) mientras lees. La forma tan gráfica, tan de la calle, tan cercana en la que este autor te lleva por estas locuras escritas no tiene desperdicio.
Lo siento, no pienso desmembrar cada relato, pero si daros una pista de lo que puede ser para cada uno de nosotros el ponernos en las situaciones en las que Aitor lleva a sus personajes. Por supuesto tengo mi favorito y no os lo diré, porque no quiero condicionar a nadie.
- LA NOCHE DEL CHIHUAHUA: Imaginaos que bajáis con vuestro perro a la calle y dejáis a vuestra novia en casa preparada para el tema. Volvéis del videoclub y todo cambia, pero de forma surrealista. El protagonista de esta historia se verá envuelto en una sucesión de absurdas situaciones extrañas sin pies ni cabeza, con el aderezo de la personalidad impasible y el humor desternillante y ácido del Miguel, el novio. No he podido reírme más, de verdad. Increíble.
Este relato tiene su historia personal, porque al ir leyéndolo se lo contaba a mi pareja y a mi compañero del curro y ambos se reían solo al contar las situaciones del relato y todo lo que le pasaba a Miguel. Hasta me pidieron que les contara como terminaba porque les pico la curiosidad…..y solo era el primero. De diez para mí.
2. EL DESAFÍO: Un aficionado a la escalada decide ir con sus amigos a la montaña del Aneto. En principio una escalada fácil para ellos, pero…..el despropósito más inimaginable se cruzará en sus caminos. Otra inherente ida de olla de Aitor que nos lleva al extremo de mezclar la tensión y la risa de una forma suculenta para el buen paladar del lector.
3. JACINTA: La envidia que sentí al leer este relato es digna de que venga Kevin Spacey y me castigue con este pecado capital a más no poder. La idea es tan absolutamente brillante como desternillante y descomunalmente original.
Una pareja de novios con problemas. Ella se quiere casar y el no. Un psiquiatra de por medio y un giro inesperado, por no decir sorprendente y maravilloso que te hace simplemente descubrirte ante el arte de Aitor y su habilidad para hacerte reír de nuevo entre situaciones irracionales al borde de la camisa de fuerza. No quiero que se me vea el pelo, pero es que este relato hace que los calificativos y sinónimos se me queden cortos.
4. AZUL: ¿Crees que ya lo has leído todo y que el autor no te va a sorprender? Ja y ja. Sí, el señor Bertomeu la vuelve a liar con lo que parece ser el sueño o no sueño erótico de una novia con otro que no es su novio. ¿Qué pasará? Ni te lo puedes imaginar.
5. DESPERTAR: No os creáis que por ser el último va ser el peor…..JAMEMATEN. Eres profesor de matemáticas y tras un duro día de trabajo te tomas una cerveza en un bar y te despiertas en una habitación sin saber donde estás y como has llegado hasta allí. Para colmo te tienes que enfrentar a un loco psicópata que te deja problemas para resolver, pero estos son a vida o muerte. Lo que pasa luego solo puede salir de nuevo de la mente calenturienta y humorística del autor que remata la faena de forma magistral con un cuento lleno de acción y decisiones a cuales más jodidas para el profesor.
Esto es un pequeño resumen de un libro que de verdad no os recomiendo, os exijo que leáis. «Trancemónium» (mira que me ha costado aprenderme el nombre je,je) es como cuando te encuentras dinero por la calle, que te da un subidón que te cagas y te crees el amo del mundo, pues igual. Hacer reír es lo más difícil del mundo y conseguirlo sin imágenes de por medio aun más, es por ello que el valor de esta obra y su autor es doble. Tanto por su calidad literaria y su lenguaje coloquial.
Gracias de todo corazón Aitor Bertomeu por haberme hecho más feliz con tus locuras escritas. Diez sobre diez. Felicidades amigo.
Y tú, si tú. Ya estas tardando en adquirir esta joya lunática.
Óscar Lamela Méndez
Gracias a ti por esta maravillosa reseña 🙂
Ha sido un placer