Reseña de Dark Investment: Operación tangencia de Javier Ara
Si hay alguna manera en la que este humilde contador de historias os puede convencer de que os estáis perdiendo un cómic cojonudo y que después de un año larguísimo de espera, su autor no nos ha defraudado, Operación Tangencia es la respuesta. Javier Ara nos vuelve a dar las dosis necesarias de dopamina para gozar este cuarto arco que cierra el abierto con anterioridad en este universo de Dark Investment con El incidente Calabrina, Trata de almas y Moja bragas. Ciencia ficción macarra, mezclada con fantasía, superhéroes y villanos y un trasfondo político y con cierta crítica social e incluso burla a la humanidad de hoy en día, que la hace muy muy divertida.
128 páginas color. Rústica con solapas. 17 x 24,5 cm. Drakul.
Autor: Javier Ara
Conforme vas pasando sus páginas, notas el empaque y la estructura tan bien estudiada por el autor. Nada esta tirado al azar y los diálogos demuestran lo bien pensada que está. Os confieso, que en algunas ocasiones me he sentido un lerdo al perderme en la complejidad de su dialéctica, no porque esté escrita de una forma farragosa, sino porque aun siendo un universo inventado todo tiene sentido. Como estan realizados los diferentes estatus del multiverso y como, los de siempre, manejan a su antojo le devenir de los seres humanos y otras especies, en este caso con el tráfico de almas y metiendo al Cielo de por medio, me ha parecido genial. Si algo le sobra a esta historia, es originalidad. A las pruebas me remito con esta imagen y trasunto de «Lo que somos todos»:
Vamos al lío y a intentar contar lo justo y necesario de esta cuarta parte. Los que habéis llegado hasta aquí, ya conocéis a muchos de los personajes de entregas anteriores, pero en esta en particular, me ha gustado mucho el desarrollo que le ha dado a Wenceslao, un personaje que desde un principio no te cae bien, sobre todo tras liar a Angélica y engañarla para utilizarla como herramienta para lo que esta por venir. La tangencia, el asalto y destrucción del Cielo y para provocar la liberación del multiverso y que la opresión de los de siempre, se acabe para siempre. De Moja Bragas, no sabemos nada en esta parte…
No vamos a dejar de lado los viajes en el tiempo o más bien, los vuelos astrales en los que Wenceslao busca respuestas para acometer el plan perfecto, pero ya sabemos que esto es ficción y como en la vida real, nada sale a pedir de boca. La Oscura Compaña, el grupo paramilitar del multiverso que crea Wenceslao me ha recordado mucho a una mezcla entre El escuadrón suicida y Los guardianes de la galaxia de James Gunn, es inevitable las referencias Marvelitas y Deceitas del autor, pero con su particular toque. Agares el brujo, que ya salió en la anterior entrega, Luso Imani el camaleón, Aki Larra falsificadora profesional y Martirio la zombificadora. De locos este último nombre. Sin olvidar a las dos piezas claves del plan: Capitán Titán, un tirador mediocre y nuestra querida Angélica, la abridora de portales y que los pondrá en la órbita secreta del Cielo.
No dejamos de lado los giros argumentales, la interacción entre personajes y su desarrollo, sorpresas y muertes que hacen las delicias de los amantes de la acción pura y dura, más el vertiginoso ritmo de secuencias y detalles que te obligan a seguir pasando páginas como un loco. El tratamiento del color en este trabajo es más luminoso, debido al lugar que se visita y colorido en los momentos de acción y viajes por el multiverso. Tipografía leíble, que es de agradecer, no como en muchos cómics. Viñetas con un sentido de la narrativa al hilo de lo que se cuenta en cada escena. Pura americanada nacional que debemos promocionar con mucho orgullo.
Sinceramente, es una pena que un trabajo tan bueno y currado como el de Javier Ara, se disfrute en un suspiro. En cierto modo, es un piropo para el autor, pero no puedes dejar de pensar que su trabajo de guion y tinta a full durante un año, ha pasado volando entre tus manos y ya le exiges más. Porque sí chicos/as, esto no acaba aquí. Si todo va bien y al ritmo que escribe y dibuja el autor madrileño, el año que viene tendremos noticias sobre una quinta entrega que abrirá una nueva trilogía, dentro de este universo de Dark Investment y que se llamará El multiverso en guerra. Os puedo adelantar, que el equipo de Drakul editorial, a los que les agradezco enormemente el haberme dado la oportunidad de disfrutar de esta y las demás historias, ya han leído ese quinto volumen y algo del sexto y nos ponen los dientes largos con sus impresiones personales.
Yo quedo a la espera de nuevas noticias y con las ganas de seguir disfrutando de esta saga de Javier Ara, mientras, trataré de hacerme con otros de sus trabajos, que tan buenos éxitos ha cosechado. Mi más sincera enhorabuena al autor y a la editorial, por apostar por el talento nacional y la calidad de su trabajo.
Mi puntuación es de 8 sobre 10.